El amor suele ser un foco de perfeccionamiento para el hombre: lo hace abnegado, comprometido, cariñoso, generoso y generador de una empatía sin igual. No por algo siempre se han pensado las religiones desde ese tópico, ya que esperanza, más allá de todo. Y así encontramos un bello ejemplo de él, un modelo entre tantos, en el amor filial, más precisamente aquí de los progenitores hacia sus hijos. Un vínculo grandísimo a partir de vivencias fuertes. Por eso te presentamos imágenes tiernas con frases de «te amo, hijo» para dedicarle.
Imágenes con frases para un hijo
Un hijo es una extensión de nuestro cuerpo, nuestra sangre y cada ápice del alma que poseemos. No hay abnegación y empatía más profunda que la que podemos sentir en tales circunstancias.
El padre es Dios ante los ojos del niño. No los defraudemos nunca.
Cariño, comprensión, un buen oído, presentes; un poco todo para nuestros niños.
El ser humano viene al mundo sin saber el porqué absolutamente desvencijado, material y existencialmente. Los padres, de esa manera, son los verdaderos guías, los que nos siguen a casa paso para corregirnos. Andan a tientas los niños, es cierto; aunque ya no tanto.
Ellos nos llenan el alma y nos dan un nuevo motivo por el cual luchar. Ver su rostro, lo que significamos para ellos y cómo nos necesitan son el perfecto acicate para seguir adelante y enfrentar cualquier marea.
El amor filial posiblemente sea el ejemplo más poderoso de lo que puede hacer el humano por alguien que realmente ama. No por algo múltiples pensadores cavilaron sobre una sociedad perfecta a partir de semejantes premisas.
El amor hacia un hijo no tiene límites ni comparación. Sí, el amor rompe cualquier barrera que exista. 
Gracias por tanto, gracias por el solo hecho de existir. Te protegeré hasta donde la vida me dé.
El hombre es un ser finito, mortal y limitado ¿Pero no hay ninguna manera de eternidad? Solo una: la creación de vida. En este peregrinar lo que hacemos, entonces, no es más que pasarle el testimonio a otro ser, parecido ¿Hay progresos? No, simplemente se existe.
Abnegación es el vocablo que se usa para describir la falta de egoísmo y el absoluto desprendimiento de lo propio por un ser ajeno a nosotros. Eso vivimos de manera placentera con nuestros niños.
Mucho amor, ingrediente que nunca debe faltar en la crianza de un niño. El resto se arregla, se subsana o es prescindible siempre.
Comparte mucho tiempo con ellos; hazle saber que es importante. En la vida no hay sentimiento más lindo y sagrado que darse cuenta que uno no vino para ser supernumerario o sobrante. Que vive y especial para muchos otros, quienes no concebirían el existir sin nosotros.
Ese gran tesoro que nos alegra cada mañana.
