Las navidades suelen ser ciertas movilizadoras, en el sentido afectivo: encuentros con gente que no veíamos hace tiempo, desdén momentánea de lides familiares, remembranzas por hermosas vivencias del pasado y, siempre, nostalgia por quienes ya no están. Digamos que se puede formar una mixtura difícil de sobrellevar. Sin embargo, aquí queremos poner un poco de paños fríos sobre el asunto y tener en cuenta la alegría de todo esto. Lo excesivamente solemne puede cansar, por eso te presentamos 50 memes de Navidad: imágenes chistosas con memes navideños.
Memes de Navidad para compartir
Lo excesivamente solemne representa seriedad, respeto, etiqueta; pero, a veces, puede convertir en algo gris una festividad que debería ser alegre. Sí, ese es el ejemplo de la Navidad.
Reír siempre fue algo sano. A nadie mató, al contrario, funciona como magia que apacigua a las bestias.
Reírse es madurar, es darse cuenta que tal vez la vida no es tan compleja para hacerse tantos problemas.
Reírse de uno mismo tiene dos ventajas: primero le quita rigidez a los problemas; segundo, puede servir como acicate para efectuar todo de mejor modo, sea lo que sea.
Gordura, estar lleno, comida recalentada, comida mal hecha. Los platillos siempre fueron un tópico interesante en las navidades, más allá que cada familia siempre tiene su ceremonia singular.
La esperanza de niños para que llegara el regalo deseado; el deseo de adultos de pasar un grato momento entre amigos y familiares.
Navidad es una fiesta religiosa, aunque su raigambre tiene mixturas con creencias célticas.
Nació el niño Jesús y eso debe ser motivo de felicidad. No una ocasión para flagelarse sin cesar.
Aprovecha estas imágenes para pasar unas buenas navidades. Incluso para disfrutarlas antes, desde las vísperas: una manera excelente de erradicar esa sensación de que lo bueno pasa rápido. La espera, en ese sentido, puede fungir de extensión.
Chistes en inglés y en español, dos idiomas que todos pueden entender. Pero, en favor de lo dicho, no solo esto: incluso sus humores si no son similares, pueden agradar en tanto ambos.
Un animal actuando como humano o pensando como humano siempre va a causar gracia. Un humor, en definitiva, que parte de un antropocentrismo soberbio; pero que no deja de encantar.
Lo ridículo también causa gracia. Porque en definitiva, promueve lo insospechado, lo que rompe con el sentido común. En un mundo que lo lógico predomina y donde la ruptura con ello prima en lo malo, es bueno generar quiebres pero desde la diversión. Conclusión: nos reímos y nadie sale dañado.
Navidad es un tópico inmenso para hacerte reír. Sabemos que si nos disponemos bien para las fiestas podemos funcionar como destino manifiesto: todo sale bien si pensamos, con toda seguridad, que ese será el corolario de tales ceremonias.
Reír es una medicina también ante tanta amargura. Habla de una mirada soberana, una que se para encima de cualquier vicisitud, que halla soluciones siempre. Hay que ser pragmáticos y parte de ese pragmatismo lo da la carcajada.
Lo insospechado causa risa. Sobre todo cuando esa ruptura con el sentido común se da al final, como desenlace. Esa es la estructura básica del chiste, además de ser un anzuelo para que sigamos en forma atenta todo el relato ¿¡Sino qué sentido tendría!?
Siempre nos va a ser atractiva la figura del ser que odia las navidades. Una persona que funge como lo negativo, como el veedor de lo malo; pero que de todos modos causa risa.
Esperamos, querido lector, que el posteo haya sido de tu agrado. Y, sobre todas las cosas, que te prepare con todas las energías para las próximas navidades.