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40 poemas cortos infantiles para incentivar la poesía en los niños

Los poemas son hermosas formas de expresión, con ritmo y sumamente divertidas. Los niños suelen verse atraídos por esta forma de escritura, que tanta atención le presta a la musicalidad de las palabras. A continuación, como en ningún otro sitio, presentamos 45 poemas cortos infantiles: la mejor selección.

Poemas cortos para niños

Así es (maría Elena Walsh)

El cielo es de cielo,
la nube es de tiza.
La cara del sapo
me da mucha risa.
La luna es de queso
y el sol es de sol.
La cara del sapo
me da mucha tos.

La primavera ha venido (Antonio Machado)

La primavera ha venido
nadie sabe cómo ha sido.
Ha despertado la rama
y el almendro ha florecido
y en el campo se escuchaba
el gri gri del grillo.
La primavera ha venido
nadie sabe cómo ha sido.

En mi cara redondita (Gloria Fuentes)

En mi cara redondita
tengo ojos y nariz,
y también una boquita
para hablar y para reír.
Con mis ojos veo todo,
con la nariz hago achís,
con mi boca como como
palomitas de maíz.

El humo (Elsa Bornemann)

El humo de las chimeneas
se va de viaje
y por eso se pone
su mejor traje.
Para no perderse
deja sus huellas
por toda la escalera
de las estrellas.

Dame la mano (Gabriela Mistral)

Dame la mano y danzaremos;
dame la mano y me amarás.
Como una sola flor seremos,
como una flor, y nada más…
El mismo verso cantaremos,
al mismo paso bailarás.
Como una espiga ondularemos,
como una espiga, y nada más.
Te llamas Rosa y yo Esperanza;
pero tu nombre olvidarás,
porque seremos una danza
en la colina y nada más.

Poemas infantiles con rimas

Caricia (Gabriela Mistral)

Madre, madre, tú me besas,
pero yo te beso más,
y el enjambre de mis besos
no te deja ni mirar…

Si la abeja se entra al lirio,
no se siente su aletear.
Cuando escondes a tu hijito
ni se le oye respirar…

Yo te miro, yo te miro
sin cansarme de mirar,
y qué lindo niño veo
a tus ojos asomar…

El estanque copia todo
lo que tú mirando estás;
pero tú en las niñas tienes
a tu hijo y nada más.

Los ojitos que me diste
me los tengo de gastar
en seguirte por los valles,
por el cielo y por el mar…

La noche tiene sueños (Gloria Pérez)

La noche tiene sueños
hechos con luna
y una ilusión larguidulce
que te acuna.

La noche tiene juegos
para acunarte
mientras mamá te mira
acurrucarte.

La noche está repleta
de maravillas
que siembran los silencios
en zapatillas.

Junto a tu asombro
recién nacido
la noche se hace niño
en nuestro nido.

Y brillan las luces
del mundo entero
cuando mamá repite,
hijo, ¡te quiero!

Buen viaje (Amado Nervo)

Con la mitad de un periódico
hice un buque de papel,
y en la fuente de mi casa
va navegando muy bien.

Mi hermana con su abanico
sopla que sopla sobre él.
¡Muy buen viaje, muy buen viaje
buquecito de papel!

Canción de niño que vuela (Sebastián Tallón)

El niño dormido está,
¡y qué sueño está soñando!
¿Qué sueña? Sueña que vuela.
¡Qué bien se vuela soñando!

Abre los brazos, los mueve
como un ave, y va volando…
¿Qué sueña? Que no es un sueño.
¡Qué bien se sueña volando!

En la cuna quieto está.
Pero sonríe, soñando.
¿Qué sueña? Que vuela, vuela.
¡Qué bien se vuela soñando!

Ayer guardé el sol en una caja (Edith Vera)

Ayer guardé el Sol en una caja
y el día se nubló.

Lo saqué entonces de la caja aquella
y el día se aclaró.

El sauce que lloraba,
rio.

Poemas cortos y divertidos para niños

La mariposa lee cuentos (Anónimo)

Una mariposa blanca
en mi mano se ha posado,
después de leer mi cuento
de mi cuaderno ha volado.

¿A quién se lo habrá contado?

La recibo con sorpresa
alegre vuelve al momento
y en mi cuaderno se posa
¿Será que le gusta el cuento?

El paisaje de las ardillas (Anónimo)

He descubierto una ardilla
en la cima de una roca,
que muy quieta mira al mar
abriendo mucho la boca.

Y aunque vive siempre aquí
y en la roca está su casa,
no se cansa del paisaje
¡Lo mismo que a mí me pasa!

Los caracoles viajeros (Anónimo)

Tomó un avión a Finlandia
sin saber geografía,
y el caracol congelado
se arrepintió al otro día.

Un caracol aplicado
fue a vivir a Benidorm
estudió geografía
y encontró sol y calor.

¡Y le fue mucho mejor!

La sombra de la avispa (Anónimo)

Una avispa despistada,
cayó en una regadera,
pero su sombra más lista,
mirando se quedó fuera.

La sombra muy decidida,
sola quiso ir a volar,
pero no encontró las alas
y no se pudo marchar

Y la avispa calentita
no salió hasta primavera,
mientras la sombra en invierno
estuvo esperando fuera.

El caballo con patines (Anónimo)

Un caballito muy negro
tiene relucientes crines,
y galopa muy contento
con cuatro blancos patines.

Da piruetas en el aire
demostrando su destreza,
otros caballos lo miran
con envidia y con sorpresa.

Como se divierte mucho
y se lo pasa tan bien,
las yeguas y los caballos
también quieren aprender.

Crea en el campo una escuela,
allí lo ha puesto de moda,
los caballos con patines,
es lo que se lleva ahora.

Poemas infantiles sobre animales

Mariposa del aire (Federico García Lorca)

Mariposa del aire,
qué hermosa eres,
mariposa del aire,
dorada y verde.
Luz del candil,
mariposa del aire,
¡quédate ahí, ahí, ahí!…
No te quieres parar,
pararte no quieres.
Mariposa del aire
dorada y verde.
Luz de candil,
mariposa del aire,
¡quédate ahí, ahí, ahí!…
¡Quédate ahí!
Mariposa, ¿estás ahí?

Canción de cuna de los elefantes (Adriano del Valle)

El elefante lloraba
porque no quería dormir…
—Duerme, elefantito mío,
que la luna te va a oír…

—Papá elefante está cerca;
ya se le oye mugir;
duerme, elefantino mío,
que la luna te va a oír…

El elefante lloraba
(¡con un aire de infeliz!),
y alzaba su trompa al viento…
Parecía que la Luna
se limpiaba la nariz…

El salmón (Anónimo)

Detrás de un salmón
nada un tiburón,
lo caza en Alaska
cansados los dos.

Asustado grita:
¡Nooo!, por favor,
mi vida es muy corta
¡Muestra compasión!

Abriendo su boca
lo deja escapar
y corriente arriba
lo ha visto nadar.

El grillo y la luna (Anónimo)

Un grillo cantaba
cri cri muy contento,
mirando a la luna
en el firmamento.

Cri cri le cantaba
‘eres la más bella’
y la luna reía
junto a las estrellas.

Cri cri le cantaba
‘eres tan hermosa’
y la luna brillaba
creyéndose diosa.

El conejito con gafas (Anónimo)

Han puesto gafas de ver
a un pequeño conejito
y brincando va a la escuela,
contento, dando saltitos.

¿Ves las letras con las gafas?
– Le pregunta el profesor –
y contestó el conejito:
¡Veo ahora mucho mejor!

Poemas para niños de preescolar

Abuelita (Tomás Allende Iragorri)

Quién subiera tan alto
como la luna
para ver las estrellas
una por una,
y elegir entre todas
la más bonita
para alumbrar el cuarto
de la abuelita.

Las cinco vocales (Carlos Reviejo)

Con saltos y brincos,
del brazo las cinco,
muy poco formales
vienen las vocales
¿Las conoces tú?:
a, e, i, o, u.
A, grita que grita,
se enfada y se irrita
y se va al teatro.
Sólo quedan cuatro.
E, llama que llama,
se marcha a la cama.
Con dolor de pies.
Sólo quedan tres.
I, chilla que chilla,
se sube a una silla
porque ve un ratón
Sólo quedan dos.
O, rueda que rueda,
sálvese quien pueda.
Rodando se esfuma.
Sólo queda una.
U, muy asustada,
se ve abandonada
y se va a la luna.
No queda ninguna.
¿Las recuerdas tú?:
a, e, i, o, u.

La rama (Octavio Paz)

Canta en la punta del pino
un pájaro detenido,
trémulo, sobre su trino.

Se yergue, flecha, en la rama,
se desvanece entre alas
y en música se derrama.

El pájaro es una astilla
que canta y se quema viva
en una nota amarilla.

Alzo los ojos; no hay nada.
Silencio sobre la rama,
sobre la rama quebrada.

Agua, ¿dónde vas? (Federico García Lorca)

Agua, ¿dónde vas?
Riendo voy por el río
a las orillas del mar.

Mar, ¿adónde vas?
Río arriba voy buscando
fuente donde descansar.

Chopo, y tú ¿qué harás?
No quiero decirte nada.
Yo…, ¡temblar!

¿Qué deseo, qué no deseo,
por el río y por la mar?
Cuatro pájaros sin rumbo
en el alto chopo están.

Pegasos, lindos pegasos (Antonio Machado)

Pegasos, lindos pegasos,
caballitos de madera.

Yo conocí siendo niño,
la alegría de dar vueltas
sobre un corcel colorado,
en una noche de fiesta.

En el aire polvoriento
chispeaban las candelas,
y la noche azul ardía
toda sembrada de estrellas.

¡Alegrías infantiles
que cuestan una moneda
de cobre, lindos pegasos,
caballitos de madera!

Poemas cortos sobre la naturaleza para niños

Crepúsculo (Baldomero Fernández)

El cielo azul
con nube blanca.

El cielo azul
con nube rosa.

El cielo azul
con nube de oro.

Y un pajarito negro.

El verano viene (Aída Berenguer)

Con el sol jugando;
corre, corre, corre,
corre, que te alcanzo.
El verano quiere
jugar con la playa;
corre, corre, corre,
que te moja el agua.
El verano quiere
jugar con los niños;
corre, corre, corre,
corre que te pillo.
El verano viene
lleno de emociones;
corre, corre, corre,
que ya hay vacaciones.

Otoño llegó (Gloria Fuentes)

Otoño llegó, marrón y amarillo.
Otoño llegó y hojas secas escampó.
El viento de otoño sopla soplará,
con las hojas secas me dejan jugar.

Sol de invierno (Antonio Machado)

Es mediodía. Un parque.
Invierno. Blancas sendas;
simétricos montículos
y ramas esqueléticas.

Bajo el invernadero,
naranjos en maceta,
y en un tonel pintado
de verde, la palmera.

Un viejecillo dice,
para su capa vieja:
«¡El sol, esta hermosura
de sol!…» Los niños juegan.

El agua de la fuente
resbala, corre y sueña
lamiendo, casi muda,
la verdinosa piedra.

La casa sobre el mar (Clara Saavedra)

¡Cierra, niña, los cristales,
que se entran las gaviotas!
Acuérdate que esta casa
no es casa como las otras.

Que puede ser un fanal
que puede ser una rosa
de los vientos sobre el mar
encallada entra las rocas…

¡Cierra, niña, los cristales,
que se van a entrar las olas…
e igual como ayer la espuma
vendrá a salpicarte toda…!

Ayer se quedó entornado
el ventanal de la alcoba,
entraron las golondrinas
que iban jugando a la ronda.

Poemas infantiles sobre la amistad

Cultivo una rosa blanca (José Martí)

Cultivo una rosa blanca
en junio como enero
para el amigo sincero
que me da su mano franca.

Y para el cruel que me arranca
el corazón con que vivo,
cardo ni ortiga cultivo;
cultivo la rosa blanca.

Amistad (Carlos Castro Saavedra)

Amistad es lo mismo que una mano
que en otra mano apoya su fatiga
y siente que el cansancio se mitiga
y el camino se vuelve más humano.

El amigo sincero es el hermano
claro y elemental como la espiga,
como el pan, como el sol, como la hormiga
que confunde la miel con el verano.

Grande riqueza, dulce compañía
es la del ser que llega con el día
y aclara nuestras noches interiores.

Fuente de convivencia, de ternura,
es la amistad que crece y se madura
en medio de alegrías y dolores.

La ronda de los amigos (Carmen Lavanchy)

A la ronda de los amigos
te invitamos a jugar.
Ven, canta conmigo
y muchos amigos podrás encontrar.

Mi amigo es la cuncuna
me cuenta que quiere volar.
Ven, canta conmigo
y la cuncuna tu amiga será.

Mi amigo es el cartero
y noticias me viene a dejar.
Ven, canta conmigo
y el cartero tu amigo será.

Trato hecho (Amado Nervo)

—Oye, pichoncito amigo,
yo quiero jugar contigo.
—Niño, si quieres jugar,
ven, sube a mi palomar.
—Me faltan alas, no puedo…
Baja tú, no tengas miedo.
—Sin miedo voy a bajar
y jugaré satisfecho;
pero trigo me has de dar.
—Pichoncito, trato hecho.

Poema al no (Gloria Fuentes)

No a la tristeza.
No al dolor.
No a la pereza.
No a la usura.
No a la envidia.
No a la incultura.
No a la violencia.
No a la injusticia.
No a la guerra.
Sí a la paz.
Sí a la alegría.
Sí a la amistad.

Poemas sobre emociones para niños

¡Soy feliz! (Anónimo)

¡Soy feliz!,
gritó un lucero
a voces al firmamento
y la luna y las estrellas
contestaron al momento:

Nos alegramos por ti,
pero deberías callar
es hora de echar la siesta
y queremos descansar.
¡Deja ya de molestar!

Cuando nos sentimos orgullosos (Anónimo)

Subió peldaño a peldaño
hasta el último escalón,
subió con mucho trabajo
a lo más alto llegó.

Estuvo allí unos minutos,
del paisaje disfrutó,
de sus sueños, de su vida
y al poco tiempo bajó.

Poema corto sobre la felicidad individual (Anónimo)

En el mar hay una barca
donde vive un pescador,
no tiene casa en la tierra
porque él así lo eligió.

En la tierra otro hombre pesca
mirándolo con dolor,
porque piensa, equivocado;
que un hogar nunca encontró.

Dos cañas, dos pescadores,
dos vidas y un pensamiento,
dos hombres muy diferentes
pero los dos muy contentos.

Triste mariposa (Anónimo)

Volando de flor en flor
la vieron en primavera,
envidiaron su hermosura
y no vieron su ceguera.

Sus grandes ojos oscuros
dejaban ver su tristeza,
aún siendo una mariposa
de extraordinaria belleza.

Triste mariposa linda
entre todas la más bella,
aunque sus ojos no vean
todos la miran a ella.

El cuervo y las ardillas (Anónimo)

Ha venido un cuervo negro
asustando a las ardillas,
a ninguna vemos hoy
saltando por las orillas.

Las he llamado insistente
pero ninguna ha salido,
hasta que no ven que el cuervo
alzando el vuelo se ha ido.
Por eso se han escondido